martes, 27 de julio de 2010

las cosas cambian... el mundo se transforma contigo

Despertar y sentir que no es una pesadilla, creciste de golpe. Quedaron truncos los cuentos de hadas, los guiños y la sonrisa de la luna, las mariposas que te fascinaban con sus acrobáticas danzas, despertar sin luz, sin ilusiones.
Despertar en un laberinto donde no encuentras la salida, donde te acechan los peligros, donde te envuelven los pánicos, donde tienes que crecer de golpe, demostrar tu astucia, ocultar tu corazón estrujado por el miedo y cubrirte con un disfraz de valiente, erguir la cabeza con arrogancia y gritar, ¡ no necesito a nadie! Y a la vez acallar una voz interior que susurra — Mientes, te mueres por una migaja de cariño, por un “ te quiero”.
Y sigues caminando en un laberinto sin salida, fuera están los que te juzgan, los indiferentes, los insensibles, los que te dan la espalda, adentro revolviéndose en el lodo están los ladrones, los asesinos, los violadores, los narcotraficantes, los drogadictos, los alcohólicos; al igual que tú no se dan por vencidos aunque nunca encuentren la salida.

martes, 6 de julio de 2010

Nunca te arrepientas de lo que hiciste, mejor no lo vuelvas a hacer, arrepintiéndote no arreglarás lo sucedido.

Cuantas veces hemos deseado borrar un dia, un instante, un momento,
hasta un año de nuestras vidas a borrarlo todo y vaciar nuestra memoria.
 Cuantas veces no deseamos volver a ser niños, vivir todo de nuevo,
 recuperar lo que se fue o dejar que el tiempo ponga las cosas en su
 lugar. Algunos simplemente no esperan nada del tiempo. Da lo mismo
 regresar o avanzar, simplemente renuncian a que el tiempo continúe su
paso y se marchan con lágrimas y un largo adios. Si desearamos en
algún momento perder completamente la memoria y plegarnos por ejemplo
 a la frase "comezar de nuevo" ¿cuántas cosas no perderíamos? serían
como aquellas cosas que se extravían accidentalmente en una mudanza
 y luego se extrañan. Perderíamos el calor del primer beso y la sensación
 de aquel amanecer que fue perfecto. La nostalgia por amores pasados y
 la inocencia con la que nos entregamos a lo desconocido esa primera vez.
 Quedarían atras los amigos que iban a ser eternos, las cartas que nos
 hicieron llorar, la primera o última vez que vimos a un gran amor, los brazos
 mas cálidos, el día que pensamos que se iba a caer el mundo, el dolor más
hermoso, la sonrisa mas esperanzadora, el nacimiento del sentimiento más puro.
 ¿En realidad comenzamos una vida nueva o matamos otra llena de bellos
 recuerdos? dejamos una vida y un presente que nos da infinitas oportunidades
por soñar con un futuro perfecto que no existe o un pedazo de cielo donde no
 sabemos que nos espera.
¿Vale realmente la pena perder la memoria?