miércoles, 23 de febrero de 2011

El tiempo hablará por sí solo...

Me he dado cuenta de que he cambiado, ya no soy la que era antes. Ahora vivo en un mundo en el que solo existo yo, yo y nadie más... donde a veces me siento bien, pero otras siento que el mundo se me echa encima, siento como que he perdido a mis amigas, porque ya no tengo tiempo para estar con ellas, siento que sola estoy mejor y que no necesito nadie en mi vida... ya no sé como estoy mejor, si la vida que llevaba antes era mejor que esta, o al revés...Estoy confusa...¿Por qué me pasa esto a mí? Siempre la misma pregunta que nunca logro resolver. Pero creo que la vida que llevo ahora es mejor para mí y para los demás, porque así no molesto a nadie y tampoco hago sufrir a nadie. Así que por fin me decidí... después de tanto tiempo creo que seguiré con la vida que llevo ahora. Espero que estéis muy contentos, porque jamás os volveré a molestar. 
















¿Por qué regalar rosas? Se marchitan, duran poco... como lo que sientes en ese preciso momento en el que las entregas...

lunes, 21 de febrero de 2011

Sábados que saben a lunes...

Política de Santo Tomás, teoría del conocimiento de Aristóteles, ácidos y bases, vinagre, amoníco, ácido clorhídrico... 100 folios de apuntes para que luego te pregunten  eso que tu dices: "fijo que esto no entra, es una chorrada". Estás todo el fin de semana en casa, estudiando, matando el tiempo para tener la conciencia tranquila. Odio ese tipo de fines de semana, en los que no puedes salir, cogerte una borrachera y bailar hasta que se te rompan los tacones, odio pasarme las horas haciendo papeles, ejercicios... Hoy más que nunca te necesito, a ti, si a mi querido vodka, para que con tu brillo ilumines esto que ha sido un asqueroso fin de semana...                                                          

domingo, 20 de febrero de 2011

-Mira al suelo, se te ha caído algo. +No veo nada. - Se llama dignidad, zorra.

No es que esté loca, es que escondo mi tristeza tras un puñado de risas, así me resulta todo más fácil. Y no, no es que no tenga problemas, o que las cosas no me afecten, es que yo las almaceno, las meto en un bolsa, y con cada risa, los intento enviar dentro, más adentro, donde casi no los pueda ver, aunque tiene un inconveniente, de ven en cuando... la bolsa explota. 
No me vas a enamorar con flores ni champagne francés. Ni cantando en mi balcón las letras de Sabina, a mí no me sirven las velas ni los suspiros de amor. El azúcar engorda mi vida. Y luego la gente se ríe si les digo que soy romántica. Pero sólo yo sé que si amo lo hago con los ojos, con las manos, desde el calor o con la boca, sin mediar palabra.
Con tus promesas de amor eterno solo me haces la protagonista de un empalagoso cuento de hadas. Y podré enamorarme cual posesa quizá del rosa de las paredes de este romance, y de las fresas con nata que tomemos cada anochecer. Pero el capricho es pasajero. 
Una vez haya saciado mi necesidad de vestir de princesa el traje me escocerá y los picores de sus bordados me ahogarán. Y lo nuestro habrá sido como una capítulo de sexo en Nueva York, cuando la resaca de tanta dulzura haya pasado y la lucidez llegue a mi mente, quizá entonces tu no seas mi príncipe ni a mí me apetezca ser tu princesa. Así que guárdate la poesía para la noche de bodas.
Yo que soy esquiva de la dependencia emocional y de las relaciones tempranas, ahora sólo quiero vestirme para que me arranques la ropa sin permiso, sin vergüenza, sin cuidado. 
Deja la poesía para cuando la pasión se agote dando paso al amor.
                                             I ♥ this.

viernes, 18 de febrero de 2011

Tu mordiste la manzana y renunciaste al paraíso.

Quiero escapar de las cosas que no necesito y dejarlas atrás. Quiero dejar mi vida por unos momentos. volar lejos, donde nadie conozca mi nombre, empezar de nuevo, borrón y cuenta nueva. Quiero caminar con la seguridad de que soy desconocida hasta para mi misma. No quiero ser nadie y quiero serlo todo. Empezar una nueva historia y acabar la ya empezada. Olvidarme de las cosas inútiles y quedarme con los mejores recuerdos. Quiero llevármelo todo en la palma de la mano. Destino: a donde me lleve el viento.










Me he jurado a mi misma que esta vez es la última...

Y es que ya no hay lágrimas que valgan, ni misterios que cuidar, sólo la mísera certeza de que nada será igual

Ya perdoné errores casi imperdonables. Intenté sustituir personas insustituibles y olvidar personas inolvidables. Ya hice cosas por impulso. Ya me decepcioné de personas que pensé que nunca me decepcionarían. Pero también yo decepcioné a alguien. Ya abracé para proteger. Ya reí cuando no podía. Ya hice amigos eternos. Ya amé y fui amada, pero también ya fui rechazada. Ya fui amada y no supe amar. Ya grité y salté de tanta felicidad. Ya viví de amor e hice juramentos eternos, pero fallé muchas veces. Ya lloré oyendo música y viendo fotos. Ya llamé sólo para escuchar una voz. Ya me apasioné por una sonrisa. Ya pensé que me moriría de tanta tristeza. Tuve miedo de perder a alguien muy especial (y lo acabé perdiendo), ¡pero sobreviví! Y todavía vivo. Es bueno ir a la lucha con determinación. Abrazar a la vida con pasión. Perder con clase y vencer con osadía. Porque el mundo 
pertenece a quien se atreve. Y la vida es mucho para ser insignificante.


El firmamento cayó, en el centro del salón.
Y al saber, que ya de largo nuestro amor se fue,
gritamos más cada vez.
¿Y aún preguntas quien perdona a quién?.
Entras en la habitación, porque me has hecho venir.
Siempre terminas sacando lo malo de mi.
Ayer decías que no, y ahora me dices que si,
soy tu problema y tú el mal que me hace sufrir.
No me levantes la voz, que no respondo de mi.
Sabes de sobra que así no podemos seguir.
Algo me dice que no que no, que esto se pierde.
¿Y quién nos lo iba a decir?,
se secó, nuestro jardín.
Es normal, tú eres marea que viene y se va,
y yo la orilla del mar.
¿Y aún preguntas quien perdona a quién?.
No no no lo esperaba de ti,
¿cómo has podido decir, que ya no somos los mismos que no eres feliz?.
A veces piensas que no, que no soy yo para ti,
porque no sientes la estrella que hay dentro de ti.
Nos bastaría un perdón, un renovarse o morir,
Aunque ya empiezo a pensar que lo nuestro es sufrir.

Algo me dice que no, que no, que esto se pierde...


jueves, 17 de febrero de 2011

Hay demasiada puta para tan poca esquina... ¿No sabéis que el mundo no es cuadrado? No tenéis para todas...

Perdona si te estoy llamando en este momento, pero me hacia falta escuchar  de nuevo aunque sea un instante tu respiración.
Disculpa se que estoy violando nuestro juramento, se   que estas con alguien, que no es el momento,  pero hay algo urgente que he de decirte hoy.
Me estoy muriendo, muriendo por verte agonizando muy lento y muy fuerte.
Vida, devuelveme mis fantasías, mis ganas de vivir la vida, devuélveme el aire...
Cariño mio, sin ti yo me siento vacío, las tardes son un laberinto y las noches  me saben a puro dolor...
Quisiera decirte que hoy estoy de maravilla, que no me ha afectado lo de tu       partida, pero con un dedo  no se tapa el sol...
Estoy muriendo, muriendo por verte, agonizando muy lento y muy fuerte.


martes, 15 de febrero de 2011

Y al final me cansé de quererte, de la bronca del domingo, de vivir a la sombra siempre, de esa que pude haber sido.

No sé si alguna vez me has querido. Ni siquiera quiero pensar si todos aquellos regalos eran fruto de algún tipo de arrepentimiento y culpa. Pero hoy decidí que he terminado contigo. Tendría que haberlo hecho hace mucho, pero no podía, me paralizaban todos los momentos, todas las anécdotas, todos los días importantes y aquellos que no lo eran tanto. Los recuerdos se convertían en pequeñas esposas que retenían mis manos, que impedían que éstas cortaran el ya fino hilo que nos une. Pensé que esto sería mucho más grande. Pensé que sería algo legendario. Pensé que eras diferente. Pero me di cuenta de que fue grande, sí, un gran mentira. Fue legendario, sí, porque siempre lo recordaré. Y fue diferente, sí, porque todo lo que considero diferente acaba siendo tan igual como lo otro. ¿Qué otro? Aquello que duele cada día de mi vida y que nunca olvido.


Me dijiste se ha acabado, lo mejor para los dos,
y pensé decirte algo antes del portazo.
Te dejaste y nos dejamos, la ternura en un cajón,
y esa noche nos follamos en vez de hacer el amor

domingo, 13 de febrero de 2011

Esto es una puta mierda.


Yo no soy como las que intentan llorar, soy la que se lo guarda todo hasta el final, la que llora con motivos, la que se averguenza de llorar y agacha la cabeza cuando lo hace para que la menor cantidad de gente la vea, la que es tan gilipollas que juro no volver a llorar por un tio y lo ha vuelto ha hacer, la que se encierra en su habitacion cada tarde y solo sale para cenar, la que intenta olvidarlo todo y no lo logra, la que escirbe para desahogarse y no le funciona.  

sábado, 12 de febrero de 2011

No te preocupes, lo que te pasa es síntoma de que lo supimos disfrutar.

Ya lo sé, ya sé que darías todo por ella. Que sus ojos son el único lugar donde no te importaría morir ahogado y que su mirada es tu bandera. Que tu corazón se acelera con solo intuir lo que se siente al rozar sus labios, que te mueres por estudiar cada centímetro de su piel. Sé que para ti es como una mañana de primavera, que amanecerías cada día con su pelo enredado entre tus dedos y tus manos en su espalda. También sé que ella es lo que impulsa hacia delante, pero a la vez te frena, y que darías todo por que su voz no fuera lo que hace que la sangre corra por tus venas. Piensas que nadie lo entiende, que estás perdido por el vaivén de sus caderas, que su sonrisa es lo que te da fuerzas. Pero no te engañes, que aquí no estamos para pasiones desteñidas. Llega un momento en el que hay que abrir puertas nuevas, y dejar atrás aquello que, aunque duela, no te pertenece. Te quedan muchas miradas de las que enamorarte, no sería la primera vez que lo haces.

Y dale con esperar cosas de mí, si queréis esperar iros a hospital público y a mí, dejadme en paz.

Me gustaría despertarme, pero ya estoy despierto,
puedes parar el lugar pero no el tiempo,
a mí lo que me gusta es jugar a que es un cuento,
un sueño bien cierto, con tal de verme bien, co.

Pero hoy por la mañana no me apetece jugar
y verle la puta cara al mundo real,
siempre quise ser palmera enfrente del mar
y que mi trabajo fuera estar
y no pensar en respirar, siquiera.

lunes, 7 de febrero de 2011

Lo más peligroso de la vida, es vivirla.

Odio la asquerosa sensación que me recorre el cuerpo cada vez que me pasa algo malo con alguien, la puta sensación de que nadie me va a aguantar nunca, que no voy a encontrar a quien quiero y que nadie me quiere a mí. Quizá, cuando empiece otra vida, todas estas sensaciones se acaban de una vez, pero claro, también tengo la sensación de que nunca voy a empezar otra vida, hay algo que me ata a esto a lo que algunos llaman vida y yo llamo costumbre o hasta rutina. Últimamente no hago nada nuevo, es siempre lo mismo, y me aburre, necesito en mi vida a algo o a alguien que me despierte una sensación, valga la redundancia, para sacar una sonrisa, para levantarme con ánimo y para acostarme pensando en que al día siguiente, será un fantástico día, pido esto, porque... añoro los tiempos pasados, los tiempos mejores en los que era feliz y no lo sabía...
¿Tan difícil es ser la vida, el mundo, los sueños, la única mujer que hay en el infinito a la que nunca puedes olvidar y por la que siempre vas a luchar de alguien? Yo creo, que lo más difícil es darse cuenta de ello y creérselo, porque cuando ya no tienes lo que tenías, es cuando te das cuenta, de que lo has tenido y lo has perdido.
Tengo 17 años, tiempo que se me ha pasado volando, pero creo que me va a costar un mundo superar los 5 meses que me quedan, 5 meses... que se dicen pronto pero tardan en pasar... aunque supongo, que como me pasa con todo, ahora me canso y luego, lo echaré todo de menos. 


jueves, 3 de febrero de 2011

Odio a mi sexto sentido.

El diccionario define decepción como desengaño que se experimenta al no recibir, conseguir o suceder algo como se esperaba, se expresa con sentimiento de dolor, frustración o tristeza.


La decepción puede venir de muchas formas y tamaños, puede llegar en forma de planes fastidiados, de amigos o de una pareja por la que te sientes traicionada. Tal vez puede llegar como resultado de un examen, la reacción de un enemigo o una esperanza perdida. El caso es que no importa como llegue, porque siempre te corroe por dentro. Durante un rato, hace que vuelvas a perder la esperanza, te deja el cuerpo muerto y sin ganas, sin ánimo para hacer más que encogerte en un rincón de tu alma. 
Hay veces que la desilusión no llega, sino que te ataca. Y esas veces son las peores... Es como si te picotearan el cuerpo, te dañaran poco a poco para que recobres la esperanza deprisa, y cuando estás apunto de conseguir esa confianza... ¡zaaas! otro picotazo... y vuelves a caer. Al final, tienes el cuerpo tan molido a pequeños picotazos que no tienes ganas de intentarlo ni una vez más, ni de perdonar... Mi consejo es que aunque te lo den todo hecho, no permitas alegrarte demasiado, por si vuelve a fallar...


Peor que la decepción, es la impotencia, el hecho de querer y no poder perdonar, preguntarte qué has hecho para que pase todo eso, para que te mientan y te decepcionen.
Por qué tendremos esas penosa sensación de impotencia, de no poder volver atrás y no escuchar lo que ya hemos escuchado, de no poder olvidar esas palabras que tanto daño nos han hecho, de no poder perdonar aunque te mueras de ganas...


Dicen que en el amor y en el juego todo vale... Hay gente que se lo toma demasiado enserio y yo empiezo a pensar que todo no vale, que el amor no existe y que todo es una pérdida de tiempo, porque cuando menos te lo esperas, cuando mejor te van las cosas, empezarás a desconfiar y tras esa confianza, vienen las desilusiones, las decepciones y el hecho de pensar que todo ha sido una pérdida de tiempo, de fuerza y de ganas.


¿Borrón y cuenta nueva? ¡Ja! Putada y sufrimiento.